lunes, agosto 31, 2009

Buitres


Me senté a fumar pensando y así pasé un rato mientras pensaba fumando. Al terminar noté una sombra que reptaba frente a mí. Miré hacia arriba y ví unos cincuenta buitres volando por sobre mío formando un círculo. Me recordé de aquel niño que me dijo -cuando veas una de ésas sombras muévete, así el buitre no piensa que estás muerto-. Hoy no me moví; me percaté que llevo muerto mas de un siglo.

Zoorelato




Acercó su hocico a la suela del zapato y percibió lugares distantes. Después de unos segundos trepó al sofá y se echó al lado de él formando un pequeño ovillo triste; y pensó en ella. Ninguno de los dos se precató de la uniformidad de sus pensamientos.

viernes, agosto 07, 2009

Lo simple


Deconstruyamos el mundo mi amor. Deconstruyamonos hasta volvernos una sola letra. Si el mundo entero cabe en la circunferencia de la o, resumamos nuestra vida completa en un signo diacrítico como la coma, que es una pausa. Hagamoslo todo mas simple, que una vida complicada es mas difícil de llevar.
P.S. Variación de una idea

Ojos


Tenemos dos opciones, me dije. Podemos seguir el sendero de las lagartijas o tomar la calle empedrada. Algo adentro de mí se molestó al mencionar el sendero, pero por ser un trayecto mas corto y valorando la economía del tiempo me decidí a seguir ésta ruta. Había caminado pocos pasos cuando me encontraron esos ojos silentes y apagados que tanto me afectan. Todavía no lo entiendo bien, pero sé que tenemos otros ojos que ven mas adelante y nos informan por medio de intuiciones, aunque muchas veces no les prestemos la atención que requieren.

In pace

Y si mi alma estallara



La noche sangra y el viento se ha marchado. Todo es calma, todo es silencio. Hasta mi pequeña minina ha caído rendida y duerme plácida sobre el amueblado que alguna vez fué de la abuela. Las horas de la noche se han fundido como el bronce haciendo que éste momento se vuelva eterno y toda la eternidad cabe en éste minuto. La angustia es la única sensación que nunca se marcha y en éste minuto es eterna e inexorable. Y si mi alma estallara lo haría en una lluvia dispersa de gotas gruesas, ácidas, fulminantes.

jueves, agosto 06, 2009

El pelirrojo


La última vez que lo vi al pelirrojo fué hace unos 20 años. Yo tenía trece y él era un niño pequeñito y tímido. Pequeñito en todo sentido como consecuencia de ser hijo de un coronel. Me recuerdo de él porque es el tipo de pelirrojo de tez morena; esa mezcla poco agraciada que produce desconfianza.

Hoy volví a verlo en el mismo sitio en donde él solía vivir. Tumbaron la casa y hay algunos trabajadores removiendo los escombros. Me dió pena ver al pelirrojo increpando duramente a uno de ellos, restregándole en la cara que era él quien le daba empleo. El trabajador, cabeza gacha, no le rebatía. El pelirrojo, con las secuelas de crecer bajo la figura autoritaria de su padre, se desquitaba con el pobre hombre.

Existe en Guatemala una fuerte tradición de hundir al otro si estás en una posición de poder, de la misma manera que existe la costumbre de bajar la cabeza y aguantarlo todo si estás del otro lado. Si ésto fuera una película veríamos en otra escena al pelirrojo soportando humillaciones de parte de una esposa autoritaria o acudiendo a un lugar de sadomasoquismo pidiendo sesiones de latigazos y palabras denigrantes. Pobre el pelirrojo.